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lunes, 21 de noviembre de 2016

PARQUE NACIONAL DE GARAJONAY


Se encuentra en la isla de La Gomera, en la provincia de Tenerife, en las Islas Canarias. El Parque Nacional ocupa un 10% de la superficie total de la isla (3.984 hectáreas). Declarado como Parque Nacional en 1981, en 1987 la UNESCO lo incluyó entre los bienes que forman parte del Patrimonio de la Humanidad, y desde el 2012, junto con toda la isla, es Reserva de la Biosfera.
El Parque Nacional de Garajonay debe su nombre a la leyenda de los amantes Gara (princesa gomera) y Jonay (hijo de un rey tinerfeño), quienes ante la desaprobación de su amor por sus familiares, decidieron clavarse una lanza de madera y tirarse desde el pico más alto de la isla.








Garajonay está formado por una tupida selva de diferentes especies vegetales, envuelta frecuentemente por un mar de nubes, confiriendo al bosque un aspecto mágico. Estas nieblas, son esenciales para su propia supervivencia en un territorio insular dominado por la aridez. Este bosque, siempre verde, recibe el nombre de laurisilva, cuya existencia está ligada a una elevada humedad y temperaturas suaves, con escasas oscilaciones durante el año.
Este bosque de laurisilva canaria, es un tipo de herencia de los bosques subtropicales que ocupaban gran parte de Europa y el norte de África hace varios millones de años, por lo que “Garajonay” puede considerarse como un auténtico fósil viviente.
Los bosques de Garajonay no son homogéneos, pues en ellos se aprecian diferentes tipos de bosques, y otras formaciones vegetales, como las más de 2.000 especies de flora, destacando un gran número de especies endémicas exclusivas, de la Isla y de Canarias. Entre los diferentes tipos de bosques, predominan el fayal-brezal seco (en zonas donde la humedad es menor, y está formado por el mocán, el palo blanco, el barbusano, el brezo y la faya, entre otras especies), la laurisilva de valle (en los valles más húmedos, orientados hacia el norte, donde la vegetación está formada principalmente por enormes viñátigos y tiles), y la laurisilva de ladera (en las laderas húmedas, está formada básicamente por loro, faya, y aceviño). En el Parque, destacan también los riachuelos, que conforman la red de corrientes permanentes de agua mejor conservada de Canarias.
El Parque cuenta con gran cantidad de hábitats, por lo que alberga una rica y diversa fauna, formada por invertebrados, vertebrados, anfibios, reptiles y aves, muchos de ellos endémicos.
 
 
 
 

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