Castilla - La Mancha, es una comunidad de gran extensión, cuyo símbolo más representativo son sus molinos de viento, pero no es lo único que ofrece. Entre sus destinos más interesantes, destacan algunos de sus pueblos, sus capitales, y gran variedad de enclaves naturales. Lo mejor para visitar sus maravillas, es establecer una ruta que nos lleve por ellas. El recorrido propuesto para conocer Castilla - La Mancha, comienza en Talavera de la Reina, siguiendo por Toledo, el Parque Nacional de Cabañeros, el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, Ciudad Real, Puertollano, Almagro, el Parque Natural de los Calares del Rio Mundo y de la Sima, Almansa, Alcalá del Júcar, Chinchilla de Monte-Aragón, Albacete, Campo de Criptana, Cuenca, la Ciudad Encantada, el Monumento Natural del Nacimiento del Río Cuervo, Molina de Aragón, Sigüenza, y terminando en Guadalajara.
TALAVERA DE LA REINA
Talavera de la Reina, famosa por su cerámica, es la
principal población de la provincia de Toledo.
Los monumentos más sobresalientes de la ciudad son, el
puente romano de Santa Catalina, el palacio Arzobispal (barroco del siglo
XVII), la colegiata de Santa María la Mayor (finales del siglo XII, de estilo
gótico-mudéjar), la iglesia mudéjar de Santiago (del siglo XIV, y con
influencias góticas), la basílica de la Virgen del Prado (de entre los siglos
XVI y XVII) y la iglesia de San Prudencio (renacentista del siglo XVI).
TOLEDO
Toledo, cuyo conjunto histórico ha sido declarado Patrimonio
de la Humanidad, es la capital castellano-manchega, y una mezcla de tiempos y
culturas, en la que todos los estilos están en sus monumentos. Es llamada también
como la “Ciudad de las Tres Culturas”.
Los grandes monumentos de la antigua capital peninsular son,
el Alcázar (mandado construir por el emperador Carlos V, sobre un anterior
castillo medieval), el Monasterio de San Juan de los Reyes, la Catedral Primada
(gótica del siglo XVI), la Sinagoga del Tránsito (que es una síntesis de las
tres culturas), la Mezquita del Cristo de la Luz (del año 999), la iglesia de
Santo Tomé (que posee el cuadro de “El entierro del Señor de Orgaz”, de El
Greco, una obra maestra de la pintura, instalado sobre la tumba del mismo), y
los puentes de San Martín (Monumento Nacional que ya existía en el siglo XIV) y
Alcántara (Monumento Nacional también, de origen romano).
En total, el plan de ordenación afecta a 90.611 hectáreas, e
incluye a dos poblaciones de la provincia de Toledo (Los Navalucillos y
Hontanar), y a cuatro de la provincia de Ciudad Real (Horcajo de los Montes,
Retuerta del Bullaque, Alcoba de los Montes y Navas de Estena). Aun así, todas
las poblaciones pertenecen a una misma comarca natural, los Montes de Toledo.
Las Tablas de Daimiel son un humedal único en Europa, y el
último representante de tablas fluviales, característico de la llanura central
de nuestra Península antiguamente. Es un ecosistema complejo, que mezcla las
características de una llanura de inundación (producida por los desbordamientos
de los ríos Guadiana y Gigüela en su confluencia), con la de un área de
descarga de aguas subterráneas procedentes de un acuífero de gran tamaño.
PARQUE NACIONAL DE CABAÑEROS
El Parque Nacional de Cabañeros, es un espacio donde habitan
grandes rapaces, cigüeñas negras y otras muchas especies en peligro de
extinción, siendo uno de los rincones protegidos más valiosos de los Montes de
Toledo. Es célebre por haber estado a punto de convertirse en campo de tiro.
En 1988, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha
declaró Parque Natural a la finca de Cabañeros, y en 1995, las Cortes aprueban
un proyecto del gobierno, por el que la finca de Cabañeros y parte de su
entorno, con una extensión superior a las 40.000 hectáreas, es declarada Parque
Nacional.
En total, el plan de ordenación afecta a 90.611 hectáreas, e
incluye a dos poblaciones de la provincia de Toledo (Los Navalucillos y
Hontanar), y a cuatro de la provincia de Ciudad Real (Horcajo de los Montes,
Retuerta del Bullaque, Alcoba de los Montes y Navas de Estena). Aun así, todas
las poblaciones pertenecen a una misma comarca natural, los Montes de Toledo.
PARQUE NACIONAL DE LAS TABLAS DE DAIMIEL
Las Tablas de Daimiel son un humedal único en Europa, y el
último representante de tablas fluviales, característico de la llanura central
de nuestra Península antiguamente. Es un ecosistema complejo, que mezcla las
características de una llanura de inundación (producida por los desbordamientos
de los ríos Guadiana y Gigüela en su confluencia), con la de un área de
descarga de aguas subterráneas procedentes de un acuífero de gran tamaño.
Estos desbordamientos, favorecidos por la escasez de
pendiente en el terreno, hicieron que se desarrollara una potente y característica
cubierta vegetal, que constituye un excepcional hábitat para la fauna ligada al
medio acuático.
Con la declaración del Parque Nacional en 1973, albergando
una superficie total de 3.030 hectáreas, se dio un gran paso en la conservación
de uno de los ecosistemas más valiosos de la Mancha, asegurando la
supervivencia de la avifauna que utiliza estas zonas, creando una Zona Integral
de aves acuáticas.
La Catedral de Santa María del Prado es otro buen ejemplo de
la combinación de estilos. Sus primeros elementos corresponden al siglo XIII,
mientras que los últimos datan del siglo XIX.
Puertollano, se encuentra en la comarca de los Pastos, entre
dos sierras, lo que hace que en su paisaje se mezclen zonas de dehesas del
Valle de Alcudia y formas serranas del valle del río Ojailén, afluente del
Guadiana.
CIUDAD REAL
Situada en el Campo de Calatrava, Ciudad Real cuenta con un
trazado moderno, con el que ha sabido mantener todo su sabor manchego.
Cuatro kilómetros de murallas y ciento treinta torreones
protegían durante la Edad Media a una población integrada por cristianos,
moriscos y judíos. Tras unificar los reinos peninsulares en tiempos de los
Reyes Católicos, Ciudad Real se convierte en capital de la provincia de La
Mancha.
El peculiar estilo gótico de esta urbe se demuestra en su
conjunto artístico, planificado por Alfonso X el Sabio, el fundador de esta
villa.
La iglesia de Santiago, es la más antigua de las que se
conservan. De origen gótico, se enriqueció con una techumbre mudéjar y unas
bóvedas barrocas.
La Catedral de Santa María del Prado es otro buen ejemplo de
la combinación de estilos. Sus primeros elementos corresponden al siglo XIII,
mientras que los últimos datan del siglo XIX.
También destaca la iglesia de San Pedro, un templo gótico de
finales del siglo XIV, cuyo perfil se asemeja a una fortaleza.
El resto del trazado ciudadrealeño actual data del siglo XIX
y principios del XX, en el que sobresalen el antiguo Palacio Medrano, el
antiguo Casino, el Ayuntamiento, y el Palacio de la Diputación Provincial.
PUERTOLLANO
Puertollano, se encuentra en la comarca de los Pastos, entre
dos sierras, lo que hace que en su paisaje se mezclen zonas de dehesas del
Valle de Alcudia y formas serranas del valle del río Ojailén, afluente del
Guadiana.
Su principal joya histórica, es la iglesia de Nuestra Señora
de la Asunción, un templo que ha sufrido mucho durante diversas guerras, pero
que ha sido reconstruido y, además, ha sido declarado Bien de Interés Cultural.
Sus orígenes datan del siglo XVI.
Destacan también el Paseo de San Gregorio (del siglo XIX),
en el que se encuentra la Fuente Agria (un manantial de aguas ferruginosas con
propiedades curativas), cuyas aguas fueron el motivo que llevó a levantar la
Casa de Baños.
El monumento más emblemático, es el castillete de Santa
María.
Chinchilla de Monte-Aragón conserva restos de murallas y
algunos tramos de época árabe. Cuenta además con un impresionante foso,
excavado en la roca, de diez metros de ancho por seis de profundidad.
Albacete se encuentra al sureste de la Meseta Central, en la
comarca de la Mancha de Montearagón.
Entre las hoces de los ríos Júcar y Huécar se asienta esta
ciudad de Castilla-La Mancha, inscrita en la lista de Patrimonio de la
Humanidad de la UNESCO por su riqueza monumental.
ALMAGRO
Almagro, se encuentra situada en el “Campo de Calatrava”,
una de las pocas regiones volcánicas de la península, con más de 250 volcanes y
calderas.
Los lugares más emblemáticos del municipio son, la Plaza
Mayor, el Corral de Comedias (un edificio especialmente importante a nivel
mundial, por ser el único que queda del Siglo de Oro completamente intacto), la
Iglesia de San Agustín (un edificio barroco del siglo XVIII), así como
numerosos palacios, como el Palacio Maestral (edificado en el siglo XIII sobre
un pequeño castillo árabe en torno al que surge la ciudad).
PARQUE NATURAL DE LOS CALARES DEL RIO MUNDO Y DE LA SIMA
El patrimonio paisajístico, geológico y de biodiversidad del
Parque Natural lo hacen único. Además de las cabras montesas y las numerosas
especies de aves rapaces que lo habitan, destaca también su riqueza en flora,
con especies propias de zonas más norteñas, que se refugiaron aquí durante las
glaciaciones.
Los conjuntos urbanos ubicados en las proximidades son
Riópar, Yeste, Cotillas, Villaverde de Guadalimar y Molinicos.
En el área existe gran cantidad de cavidades subterráneas,
destacando la cueva de los Chorros, considerada la más importante del sur
peninsular. Aquí nace el río Mundo, formando una espectacular caída de más de
80 metros.
ALMANSA
El casco antiguo, que ha sido declarado Conjunto Histórico
Artístico, está formado por calles estrechas que circundan el impresionante castillo,
edificado sobre una gran roca que corona la ciudad.
Este castillo es una fortificación gótica de origen árabe, del
siglo XIV, y posteriormente reformada en el siglo XV. Es uno de los castillos
más bellos y mejor conservados de toda Castilla La Mancha. Destacan los muros
almenados y la imponente Torre del Homenaje, que nace desde el centro mismo del
castillo.
ALCALÁ DEL JÚCAR
Alcalá del Júcar es uno de los pueblos más espectaculares y
pintorescos de la región, además de ser declarado Conjunto Histórico Artístico.
Alcalá del Júcar se encuentra en una roca sobre un meandro del río. Sus casas escalan por ella o se excavan en la tierra, ascendiendo hasta el Castillo, que lo preside todo.
Alcalá del Júcar se encuentra en una roca sobre un meandro del río. Sus casas escalan por ella o se excavan en la tierra, ascendiendo hasta el Castillo, que lo preside todo.
El castillo, de origen árabe, conserva poco de sus orígenes,
debido a derrumbamientos, cambios en las torres y la
reconquista, que hicieron que se restaurara, borrando gran parte de su origen
islámico.
Destacan también la parroquia de San Andrés (siglos XVI a
XVIII), el puente sobre el Júcar (siglo XVIII), y las cuevas de Masagó y del
Diablo.
CHINCHILLA DE MONTE-ARAGÓN
Se encuentra situado sobre un cerro que domina la llanura
manchega, en donde destacan su castillo gótico del siglo XV, y su conjunto
urbano de trazado medieval.
Chinchilla de Monte-Aragón conserva restos de murallas y
algunos tramos de época árabe. Cuenta además con un impresionante foso,
excavado en la roca, de diez metros de ancho por seis de profundidad.
En la plaza Mayor se alza el Ayuntamiento, de los siglos XVI
a XVIII.
El edificio religioso más importante es la iglesia parroquial
de Santa María del Salvador, con una mezcla de estilos que va desde el gótico
al barroco.
Otras construcciones de interés son el hospital de San
Julián, el convento de Santo Domingo, y algunos restos del convento de Santa
Ana.
ALBACETE
Albacete se encuentra al sureste de la Meseta Central, en la
comarca de la Mancha de Montearagón.
El pasaje de Lodares, construido a imagen y semejanza de las
galerías comerciales de Italia, destaca especialmente. Tiene una cubierta de
hierro y cristal, que es un gran tragaluz que une dos calles principales. Se
trata de una galería comercial y residencial, y es un claro ejemplo de
arquitectura modernista de principios del siglo XX.
La Catedral de San Juan Bautista, es una obra de estilo
renacentista - barroco, erigida como tal en 1949, cuya construcción se remonta
al siglo XVI.
Es destacable también el Teatro Circo, inaugurado en 1887, y
con capacidad para más de 1.000 personas. De estilo neo-mudéjar, ha sido
reformado en varias ocasiones, pero actualmente acoge todo tipo de
representaciones.
CAMPO DE CRIPTANA
Campo de Criptana, inmortalizada por Don Quijote de la
Mancha en su lucha contra los gigantes, aúna paisaje, cultura, tradición,
literatura e industria.
Los molinos de los que hablaba la novela de Cervantes, son
uno de los iconos de Castilla – La Mancha, y conservan la estructura y
mecanismo originales. Los Molinos, declarados Bien de Interés Cultural, son
impresionantes por dentro y por fuera.
Además de los mundialmente conocidos molinos de Campo de
Criptana, también son destacables el Pósito Real, la iglesia de Nuestra Señora
de la Asunción, un Pozo de Nieve, la laguna de Salicor, y el conjunto del Barrio
de Albaicín.
CUENCA
Entre las hoces de los ríos Júcar y Huécar se asienta esta
ciudad de Castilla-La Mancha, inscrita en la lista de Patrimonio de la
Humanidad de la UNESCO por su riqueza monumental.
La Torre de Mangana, construida en el siglo XVI, y edificada
sobre un alcázar árabe, formó parte de una antigua sinagoga, y es uno de los
símbolos municipales.
En la plaza Mayor, se alza la Catedral de Nuestra Señora de
Gracia, gótica con influencias francesas, que fue edificada sobre una antigua
mezquita. Su estructura alterna elementos góticos, renacentistas y barrocos,
fruto de su largo periodo de construcción.
Pero el monumento más emblemático de la ciudad, son las
Casas Colgadas, que datan del siglo XV. Los balcones de madera de las Casas
Colgadas, cuelgan sobre el cauce del río Huécar, pero las mejores panorámicas
de ellas se tienen desde el otro lado del río.
Otras edificaciones destacables son, el Palacio Episcopal, las
iglesias de San Miguel, San Nicolás y San Pedro, la ermita de Nuestra Señora de
las Angustias, y el convento de San Pablo.
CIUDAD ENCANTADA
Situada en la localidad de Valdecabras (considerado un
barrio pedáneo de Cuenca), y en pleno corazón del Parque Natural de la Serranía
de Cuenca, la Ciudad Encantada es uno de los parajes más espectaculares de
nuestro país, en el que se puede observar el proceso geológico del karst y
admirar sus caprichosas formaciones.
La formación más conocida de este paraje es el “Tormo”, pero
existen otras relevantes, llamadas “Los Barcos”, “Perro”, “Puente”, “Cara del
Hombre”, “Foca”, “Tobogán”, “Mar Piedra”, “Lucha Elefante Cocodrilo”,
“Cocodrilo”, “Elefante”, “Convento”, “Hongos”, “Teatro”, “Tortuga”, “Los Osos”,
y “Amantes de Teruel”.
Fue declarada Sitio Natural de Interés Nacional en 1929.
El río Cuervo nace junto a la localidad de Vega del Codorno,
concretamente en la falda occidental de la Muela de San Felipe, a 1.490 metros
de altitud.
Aunque la zona más visitada y conocida del Monumento Natural
sea el nacimiento del río Cuervo y sus bellísimos saltos de agua, existen otras
zonas destacables y con elementos de gran relevancia y belleza, como el Rincón
del Cuervo. Asimismo, la elevada altitud y abundancia en precipitaciones de la
zona permiten la presencia de especies de fauna y flora inexistentes en otros
lugares de Castilla-La Mancha.
MONUMENTO NATURAL DEL NACIMIENTO DEL RIO CUERVO
El río Cuervo nace junto a la localidad de Vega del Codorno,
concretamente en la falda occidental de la Muela de San Felipe, a 1.490 metros
de altitud.
El nacimiento del río Cuervo fue declarado Monumento Natural
en 1999, y ocupa una superficie de 1.709 hectáreas.
Este lugar es especial, debido a que el agua brota de un
manantial travertínico y se escurre por enormes estalactitas de roca calcárea
(toba) recubierta de musgo, formando largas y bellas cascadas que se congelan
en invierno, ofreciendo una bella estampa.
Aunque la zona más visitada y conocida del Monumento Natural
sea el nacimiento del río Cuervo y sus bellísimos saltos de agua, existen otras
zonas destacables y con elementos de gran relevancia y belleza, como el Rincón
del Cuervo. Asimismo, la elevada altitud y abundancia en precipitaciones de la
zona permiten la presencia de especies de fauna y flora inexistentes en otros
lugares de Castilla-La Mancha.
A nuestro paso podemos avistar una importante comunidad de
aves, tanto ligadas al ecosistema forestal (gavilán, azor, águila culebrera),
como a los márgenes del río (lavandera cascadeña, mirlo acuático). También es
posible observar numerosos mamíferos (ardilla roja, gato montés). Además, se ha
reconocido un apreciable valor de conservación de la fauna troglodita (murciélagos)
y de mariposas. Las aguas del río constituyen un reservorio de fauna ligada a
sus aguas como la trucha, las libélulas, o los moluscos.
En cuanto a la vegetación, destacan los pinos silvestres y
las sabinas rastreras, pero su mayor riqueza florística la constituyen la
comunidad de orquídeas, de las que existen 19 especies diferentes.
MOLINA DE ARAGÓN
Molina de Aragón, es una ciudad con una gran riqueza
monumental. Sobre la colina, se extiende la muralla que rodea el burgo y se
funde con el castillo, y detrás de este, se encuentra la Torre de Aragón.
Otras edificaciones destacables de la localidad son la
Iglesia de Santa María la Mayor de San Gil, y el Convento de San Francisco.
Sobre el río, y separando el barrio judío de la morería, se
encuentra el Puente Románico, símbolo de la villa.
SIGÜENZA
Sigüenza es una hermosa ciudad del norte de la provincia de
Guadalajara, cuyo excelso patrimonio arquitectónico fue declarado Conjunto
Histórico-Artístico en 1965.
El castillo, la catedral y la plaza Mayor son los tres
puntos de obligada visita de la ciudad.
El castillo, fue construido en el siglo XII, con el fin de
servir como palacio-fortaleza de los obispos que fueron señores de la ciudad
durante siete siglos.
La catedral, iniciada en 1130, es románica, aunque se
desarrolló siguiendo los cánones del gótico.
En la plaza Mayor o del mercado, de estilo renacentista y
urbanizada a finales del siglo XV, destacan el Ayuntamiento y la Puerta del
Toril.
Guadalajara conserva abundantes muestras de arquitectura
religiosa, como la iglesia de San Nicolás el Real (de estilo barroco, y del
siglo XVII), la iglesia de Santiago (de estilo gótico-mudéjar, y del siglo XIV),
y la concatedral de Santa María la Mayor, construida a partir de una antigua
mezquita de estilo mudéjar.
GUADALAJARA
Guadalajara, capital de La Alcarria, es una ciudad con una
larga y rica historia, que ha dejado huella en algunas de sus edificaciones.
La calle Mayor, vertebra la parte histórica de la capital,
con edificios como el Ayuntamiento o el antiguo palacio de los Mendoza.
Guadalajara conserva abundantes muestras de arquitectura
religiosa, como la iglesia de San Nicolás el Real (de estilo barroco, y del
siglo XVII), la iglesia de Santiago (de estilo gótico-mudéjar, y del siglo XIV),
y la concatedral de Santa María la Mayor, construida a partir de una antigua
mezquita de estilo mudéjar.
Pero la construcción más importante de la capital alcarreña,
considerada el auténtico símbolo de la ciudad, es el palacio del Infantado, una
magnífica obra de estilo isabelino.
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