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miércoles, 15 de febrero de 2017

PARC NACIONAL D'AIGÜESTORTES I ESTANY DE SANT MAURICI


El Parque Nacional de Aigüestortes y Lago de San Mauricio (en catalán, y oficialmente, Parc Nacional d'Aigüestortes i Estany de Sant Maurici), fue creado en 1955, y es el único parque nacional español situado en la comunidad autónoma de Cataluña.
Cuenta con una superficie total de 14.119 hectáreas, y una zona de protección de 26.733 hectáreas. El área de influencia socioeconómica, se sitúa en las 145.057 hectáreas.
Está situado en la parte central de los Pirineos, repartido entre cuatro comarcas pirenaicas, la Alta Ribagorza, el Pallars Sobirà, el Pallars Jussà y el Valle de Arán. Se encuentra junto con los parques de Ordesa y Monte Perdido y el de los Pirineos Franceses, y es una excelente representación de los principales ecosistemas que podemos descubrir en la alta montaña catalana.
Presenta dos áreas: la oriental, de clima continental y regada por los afluentes del Noguera Pallaresa, que alimentan el lago de San Mauricio; y la occidental (Aiguas Tortas), de clima atlántico de alta montaña y bañada por los tributarios del Noguera Ribagorzana.

La geografía del parque es de alta montaña, porque gran parte del territorio sobrepasa los 1.000 metros, con picos que superan los 3.000. Abundan los lagos de origen glaciar cuaternario, y es que su principal seña de identidad es el agua. Destacan, entre todos, el valle del río Sant Nicolau (con sus característicos prados y meandros de los que proviene el nombre de “Aiguas Tortas” (aguas tortuosas)), y el valle del río Escrita con el lago de San Mauricio.
Sus aguas cristalinas, discurren a través de sus numerosos lagos y ríos, y añaden riqueza a este paisaje de los Pirineos. Junto a los torrentes y cascadas hay que destacar frondosos bosques que, en épocas de nevadas, lo convierten en un escenario hermosísimo. También es extraordinario su valor biológico, pues es un verdadero paraíso para los amantes de la naturaleza, con los lagos, torrentes, cascadas, turberas, canchales, agrestes picos y frondosos bosques de pino negro, abeto, pino silvestre, abedul y haya, que constituyen el hogar de multitud de interesantes plantas y animales de origen alpino o boreal.
Cuenta con diversos reconocimientos internacionales, como ZEPA (1988), RAMSAR (2006), o el Sistema de Calidad Turística (Q).
 
 
 

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